ENTREACTO II: RAÚL Y ALICIA EN EL BALLET

Por Carlos Ferrera

- Y tú eres la siguiente.
- Ya, porque lo digas tú...
- Eres más vieja.
- Tú tampoco eres un niño.
- Se están muriendo todas; ya te toca.
- Yo soy inmortal.
- Te veo muy crecida.
- Entierro gente más joven todos los días.
- No me amenaces.
- Contigo pienso hacer lo mismo.
- Yo soy del 31, me queda mucho por vivir.
- Yo que tú, no me hago ilusiones.
- Tengo ganas de comerme el mundo.
- Estás hecho una mierda de salud.
- Mira quién habla…
- Y se te hace mucha brujería, tu aura está débil.
- A ti también te la hacen, y desde hace más años.
- Soy inmune al brujo.
- A todo el mundo una brujería le hace mal.
- Yo soy el mal. Nada me afecta.
- Eso sí es verdad…
- La brujería solo me pone cachonda.
- Estás muy vieja.
- Pero estoy troncúa.
- Ya no puedes bailar.
- ¿Quién dijo?
- Todo el mundo lo sabe
- Envidia.
- No te puedes ni poner las zapatillas.
- ¡Todavía clavo los fouettés!
- Yo los hago mejor.
- ¡Imposible!
- No me has visto.
- No puede ser…
- Practico mucho en casa.
- (…)
- (…)
- Te reto a duelo.
- Dale.
- Una ronda de 32
- Con piruetas.
- Hecho.
- Pierde el que primero se salga de la vertical.
- O muera.
- Ok.
- No se vale parar por ictus
- Escoge las armas.
- Tutú clásico
- Tutú romántico
- No se hacen fouettés con romántico, pájaro.
- Yo tengo mi técnica.
- Te despingarás.
- Eso querrías tú.
- Yo solo te aviso. ¿Dónde quedamos?
- Mañana a las tres de la tarde aquí en la puerta del Lorca.
- De acuerdo. Mis padrinos serán Pedro y Heriberto, y mi armera, Loipa.
- Los míos, Juanito y mi hijo, aquí presentes. Mi armero, un pájaro del Diezmero.
- Vas a pasar la vergüenza de tu vida.
- Eso lo veremos.